Corte de EU concede a García Luna cuatro meses para apelación
Se ha dado a conocer que una Corte Federal en Nueva York, otorgó al ex secretario de Seguridad Pública, una nueva prórroga de 90 días para que presenten su escrito inicial de apelación contra la sentencia de 38 años de presión que se le ha impuesto desde octubre de 2024, por delitos relacionados con el narcotráfico.
Esta resolución fue publicada por el periodista Arturo Ángel, y tiene fecha del martes y publicada en los registros judiciales del caso, por lo que ahora se entiende que la jueza de la corte de apelaciones del segundo circuito, Alison Nathan, autorizó que el plazo se extiende hasta el 18 de diciembre de este año.
También se instruyó que se debe garantizar que García Luna pueda comunicarse de forma regular con sus abogados defensores, César de Castro y Valerie Gotlib, a través de llamadas legales, programadas y visitas presenciales.
Esto responde a una queja por parte de los abogados que nos den denunciaron que en los últimos ocho meses sólo pudieron hablar una vez con su cliente, lo que hacía imposible coordinar la apelación, además de qué él es funcionario federal, no ha tenido acceso a los documentos de su proceso.
Reportaron también que García Luna fue víctima de malos tratos durante su estancia en una presión en Virginia, donde se le prohibió usar cubiertos para comer y se le negó la posibilidad de bañarse o rasurarse.
“Cuando pudimos hablar con él, nos enteramos entre otras cosas, de qué desde diciembre de 2024, el señor García Luna no ha tenido acceso a ninguno de sus materiales legales, no tuvo acceso a ninguna de las transcripciones del juicio, se le privó de la capacidad de ducharse, afeitarse o incluso comer con cubiertos”
“Además, estuvo encerrado en la unidad de vivienda especial reservada para aquellos cambió las reglas de la prisión, a pesar de qué nunca recibió ninguna sola infracción disciplinaria. Sólo recibió un solo par de ropa interior y ha perdido 32 libras aproximadamente” concluyeron.
Recordemos que actualmente el secretario se encuentra recluido en la prisión de máxima seguridad de Florence, Colorado, donde de acuerdo a su defensa los abusos han cesado, aunque la incomunicación ha persistido.