Confirman primer caso humano de influenza A H3N2 en México

La Secretaría de Salud y el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER) confirmaron este viernes 12 de diciembre el primer caso de infección en una persona por influenza virus A H3N2 subclado K, una variante viral que ha sido detectada en varios países y que algunos medios han denominado “super gripe”.
De acuerdo con las autoridades sanitarias, el paciente respondió favorablemente al tratamiento ambulatorio con medicación antiviral y ya se encuentra recuperado, sin requerir hospitalización. La dependencia señaló que esta variante del virus presenta características similares a las de la influenza estacional, por lo que su manejo clínico es el mismo y no representa motivo de alarma para la población.
El Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica (Sinave) mantiene un monitoreo constante para la detección oportuna de cualquier caso relacionado con este subtipo viral, dentro de las medidas preventivas de salud pública.
Asimismo, la Secretaría de Salud exhortó a la población a acudir a los centros de salud y puntos de vacunación para aplicarse los biológicos correspondientes a la temporada invernal, especialmente las vacunas contra la influenza, COVID-19 y neumococo, como la mejor medida de prevención para reducir riesgos, evitar complicaciones y proteger a los grupos más vulnerables.
Las autoridades destacaron que la influenza A H3N2 circula cada año de forma estacional, pero la detección de este subclado subraya la importancia de la vigilancia epidemiológica continua y la vacunación como herramientas clave para la protección de la salud pública
¿Qué es la influenza A H3N2 subclado K?
La influenza A H3N2 subclado K es una variación genética del virus de la influenza A, que forma parte de los virus que circulan cada temporada invernal. El término subclado K se refiere a una mutación específica detectada mediante vigilancia epidemiológica, lo que permite a las autoridades sanitarias dar seguimiento a su comportamiento y propagación.
Especialistas han señalado que no se trata de un virus nuevo ni más peligroso, sino de una variante dentro de la evolución natural del virus de la influenza. Hasta el momento, no hay evidencia de que cause una enfermedad más grave que la influenza estacional conocida.




