Si eres de las pocas personas que no han visto “La sustancia”, te contamos que se ha convertido en una de las películas más taquilleras, pero no sólo eso, también ha logrado establecer una fuerte conversación sobre lo que daríamos por ser perfectos.
La sustancia es una película protagonizada por Demi Moore y Margaret Qualley en la que nos cuentan sobre un misterioso y poderoso químico que, al ser consumido, tiene la capacidad de alterar la percepción de la realidad de las personas.
La trama se centra en un grupo de individuos que, atraídos por los efectos prometidos de esta sustancia (como aumentar la inteligencia, mejorar el estado de ánimo o incluso ofrecer experiencias espirituales), comienzan a usarla sin saber las graves consecuencias que les esperan.
A medida que la sustancia se vuelve popular y más personas la consumen, los usuarios empiezan a experimentar no solo cambios en su percepción, sino también en su personalidad y comportamiento. Poco a poco, la línea entre la realidad y la ilusión comienza a desdibujarse, llevando a situaciones peligrosas y a un descenso psicológico en aquellos que se vuelven adictos.
¿Por qué ha sido exitosa?
Sin lugar a dudas esta película ha sacado los sentimientos más oscuros de los espectadores, pues el manejo del suspenso y la atmósfera tensa ha sido uno de los aspectos más elogiados. El filme mantiene a la audiencia en un estado constante de incertidumbre, con giros inesperados que sorprenden y generan intriga. Esto ha gustado especialmente a los aficionados al cine psicológico y al thriller.
Demi Moore ha sido ovacionada por su actuación, pues es contundente, intensa y ha conectado incluso con las nuevas generaciones, quienes aseguran que gracias a esto ha tenido “el regreso triunfal” que tanto merecía.
Además del éxito en taquilla, se ha anunciado que pronto llegará al streaming en Estados Unidos a través de la plataforma de MUBI.