Con el objetivo de crear conciencia sobre este padecimiento y reconocer todos los protocolos de prevención, diagnóstico y tratamiento, conmemoramos el Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer de Mama.
En mayo de 2023, se comenzó a sugerir la importancia de que todas las mujeres deberían empezar a hacerse revisiones cada dos años a partir de los 40 años cumplidos.
Esto debido a un cuidadoso análisis de las últimas pruebas del Grupo de Trabajo de Servicios Preventivos de Estados Unidos, que reitera que las mamografías no evitan que se desarrolle el cáncer de mama, sino que su trabajo es detectarlo en un momento más temprano.
Esto representa una nueva dirección, pues antes se recomendaba este tipo de pruebas a partir de los 50 años.
Después se cambió a que a partir de los 40 años, cada mujer debe realizarse una revisión anual, pero en los últimos años se dio cuenta de qué uno de cada 10 casos de cáncer de mama se da en mujeres menores de 45 años.
Diversas investigaciones han arrojado que el cáncer de mama surge de una combinación de causas genéticas y ambientales, desde mutaciones en los genes BRCA1 y BRCA2, hasta factores de riesgo como el consumo de alcohol, la inactividad física, la terapia hormonal, así como la exposición a radiaciones ionizantes.
A finales del siglo XX, se mejoraron las técnicas como la compresión del tejido mamario entre las placas para mejorar la calidad de imagen, y con ello se implementaron nuevas estrategias para revelar imágenes en película.
Cabe señalar que la mamografía sigue basándose en Rayos X, y eso expone a las pacientes a una pequeña cantidad de radiación.
Aunque la nueva recomendación de realizar nos mamografías cada dos años un poco de polémica, la elección es personal, si las mujeres mayores de 40 años se sienten con mayor tranquilidad, realizándose este estudio cada año está perfecto.