El presidente solicitó a la Fiscalía General de la República, se realice la investigación a fondo para aclarar las inconsistencias que existen sobre el asesinato del rector de la Universidad de Sinaloa.
Desde Palacio Nacional, López Obrador dijo que fue un acierto que la fiscalía se hiciera cargo del expediente.
“La versión inicial, en el caso del rector, versó sobre que había sido ejecutado en la gasolinera, que había puesto resistencia, incluso, que fue lo que declaró el testigo, que lo acompañaba. Luego el señor Zambada dice: no, lo asesinaron donde se dio el encuentro. Ahora la fiscalía también está dando a conocer que hay cosas que no coinciden”
El mandatario, reiteró que ese es el motivo por el que ha pedido una investigación a fondo para que se informe todo lo que se tiene que informar en libertad.
Una de las inconsistencias que ha presentado la FGR es que en la necropsia no se establece de forma correcta, los signos cadavéricos inmediatos, como la temperatura, los signos tanatológicos, livideces, ni la descripción correcta y evolución que tuvo el cuerpo.
Aparte en ningún momento se cumplieron las medidas de preservación del cuerpo.
Por último, el titular del Ejecutivo reiteró su respaldo al gobernador sinaloense, Rubén Rocha, y aseguró que en este momento todos los funcionarios de alto nivel cuentan con autoridad moral y que de no ser así, serían objeto de maltrato y chantaje.