Cómo lo habíamos venido reportando, autoridades de Los Ángeles tenían abierta una investigación por el fallecimiento del actor de Friends, pues señalaban que no quedaban claras las razones de este suceso.
El Departamento de Justicia informó durante una rueda de prensa que existía una amplia red criminal y clandestina en la que participaron el asistente del actor junto a varios médicos y aprovecharon la adicción de Perry para venderle ketamina.
“Los acusados aprovecharon los problemas de adicción de Perry para enriquecerse” explicó Martin Estrada, quien es Fiscal Federal.
La red estaba compuesta por un asistente residencial, intermediarios, dos médicos y una fuente principal de suministro de drogas que era conocida como “La reina de la Ketamina”.
Estrada, reiteró que cada uno de los integrantes de esta red sabían lo que hacían y que esto significaba un gran peligro para Matthew Perry, y aún así siguieron adelante.
Los principales acusados en este caso son el doctor Salvador Placencia y el traficante de drogas Jasveen Sangha, así como el doctor Mark Chavez y el asistente de Perry, Kenneth Iwamasa.
Al parecer, Iwamasa se encargaba de administrarle la ketamina al actor de manera continua, por lo que ahora enfrenta un cargo de conspiración por distribuir el fármaco.
Se sabe que en un periodo de dos meses distribuyeron aproximadamente 20 viales de ketamina a Perry, por los que él pagó $55,000 en efectivo.