Desde el inicio de semana vimos la reacción de los mercados bursátiles ante la elección presidencial en la que ganó Claudia Sheinbaum.
Con el anuncio de que el partido oficial ganó la mayoría del Congreso de la Unión, fue inevitable que el peso mexicano se debilitara frente al dólar estadounidense, de hecho el tipo de cambio superó las 18 unidades.
Esto contrasta con que hasta el quinto mes del 2024, nuestra moneda mostró pocos cambios acumulando una depreciación de 0.24%, pues el tipo de cambio en el 2023 cerró en 16.97 pesos por dólar.
Pero para este 2024, se tiene visualizado que la estabilidad del peso obedece a una especulación que al final no ha beneficiado en un aumento de apuestas a favor del peso, aunque no hay una base sólida que lo sostenga y esto se puede revertir en cualquier momento.
Durante el mes de mayo, la apreciación del peso se concentró en las primeras tres semanas y estuvo conectada con que el dólar estadounidense se debilitó.
Esta tendencia se vio afectada, llegó la inestabilidad para nuestra moneda y es que bajó un discurso poco conciliador por parte de la ganadora de la contienda, sumado a la promesa de reformas constitucionales que podrían poner en riesgo diversas inversiones en nuestro país, está la mayoría calificada en el Congreso, por ello la especulación creció.
Analistas coinciden en que con el cambio de gobierno, debería asegurarse la autonomía del Banco de México, así como una disciplina fiscal, un equilibrio de poderes y por supuesto la autonomía de organismos que son base para garantizar la transparencia, la competitividad y la certeza jurídica en nuestro país. Eso es lo que está en riesgo con la mayoría calificada en la Cámara de Diputados y en el Senado con Morena y los partidos aliados, pues pueden mover la Constitución a su antojo.
“El Mercado se siente nervioso sobre México, similar al sentimiento que se tenía al inicio en la pandemia en 2020” asegura el Banco Base.
Se admitió que la divisa mexicana está afectada por un sentimiento de cautela por parte de los inversionistas debido a los resultados electorales, por lo que esto puede continuar hasta que se garantice que no habrá cambios importantes en las políticas públicas.