En los pasillos de La Bestia Grupera 89.1 en Guadalajara, nos encontramos con una sorpresa musical: Aranza, Jesús y Francisco Pozas. Estos jóvenes talentosos, apenas salidos de la adolescencia, han logrado cautivar a todos con su música.
¿Quién dice que la juventud no tiene voz en el regional mexicano?
Los Pozas están aquí para demostrar lo contrario, Imagina a tres niños con edades de 6, 7 y 8 años, parados junto a su padre en el escenario de la Sinfónica Azteca. Su música llenó el Auditorio Nacional, y así comenzó su historia.
Los Pozas no solo heredaron el talento de su padre, sino también su pasión por la música. Desde entonces, no han dejado de sorprendernos. Su álbum debut, “Simplemente”, es una oda a la frescura y la autenticidad.
En él, encontramos dos éxitos que han conquistado corazones: “DPM”: Una canción pegajosa que te hace mover los pies al ritmo de su acordeón y guitarra. “Caldito de Pollo”: Una mezcla de humor y amor, perfecta para cantar en las reuniones con amigos.Estos temas han dejado su huella en lugares como Pachuca-Hidalgo, el Teatro Morelos, Toluca e Ixtapan de la Sal.
La gente los tararea en las calles y los bares, originarios de Lerma de Villada, estos jóvenes músicos tienen grandes sueños. No se conforman con conquistar solo su región; quieren llegar más lejos. El mundo entero es su escenario.En resumen, Los Pozas son la prueba viviente de que la música no tiene edad. Su talento, su energía y su amor por el regional mexicano los convierten en una dinastía que está escribiendo su propia leyenda.