Este lunes, Estados Unidos y México informaron que se retiraban de la candidatura conjunta para ser la sede de la Copa del Mundo Femenina del 2027, pues prefieren enfocarse en la edición del 2031.
La Federación de fútbol de Estados Unidos y la y Mexicana de fútbol han pedido que la competencia tenga la misma inversión que el torneo masculino para eliminar las disparidades de inversión y maximizar el potencial comercial de este torneo.
Cindy Parlow Cone, presidenta de “US Soccer” opinó que el organizar una Copa Mundial es una tarea enorme y pide tener más tiempo para prepararse y con ello tener un mayor impacto a nivel mundial.
“Estoy orgullosa de nuestro compromiso de ofrecer una experiencias equitativas a las jugadoras, a los aficionados y a todas las partes interesadas. Cambiar nuestra candidatura nos permitirá organizar una copa del mundo de récord en 2031, que ayudará a crecer y elevar el nivel del fútbol femenino, tanto aquí como en el mundo” dijo.
En el caso de México, Ivar Sisniega, reitera que el compromiso es organizar una copa mundial, femenina, memorable e histórica para beneficiar a las jugadoras y los aficionados.
Entonces, tras la renuncia de ambos países, quedan dos candidaturas encima de la mesa para albergar el torneo de 2027: Brasil que es la gran favorita, pero en la terna también están Bélgica, Países Bajos y Alemania que tienen menos opciones ya que la edición del 2019 se disputa en suelo europeo, en Francia.
La resolución final se dará a conocer el próximo 17 de mayo, durante el Congreso de la FIFA que se realizará en Tailandia.