Durante la Copa de Oro femenil de la Concacaf, Estados Unidos, demostró que sigue siendo la máxima potencia del fútbol femenino, con una apretada victoria de una anotación sobre Brasil, pero se convirtieron en las campeonas.
Con esto las estadounidenses consolidan su currículum, que cuenta con cuatro Copas del Mundo, cuatro Juegos Olímpicos y torneos continentales, incluyendo la primera celebración de la Copa Oro femenil.
Gracias al cabezazo de la mediocampista Lindsey Horan en el cierre del primer tiempo, Estados Unidos tomó a una selección brasileña, que insistió más en posesión y tiros al arco durante la final del torneo.
Brasil era el favorito a haber acumulado cinco victorias, 15 goles a favor y apenas uno en contra en su camino a la final, pero eso no fue suficiente, ya que aunque Estados Unidos tuvo un viaje turbulento y perdió de manera sorpresiva ante México. En cuartos de final, supo reponerse con un gol de 3- 0 sobre Colombia y en semifinales se fue hasta los penales frente a Canadá.
La selección de Estados Unidos tenía en sus filas a jugadoras experimentadas como Alex Morgan, Becky, shower, Brown y Crystal Dunn, supuesto por supuesto acompañadas de Lindsay Horan, quién es tienen más de 100 partidos representando a su equipo y supieron agigantarse en la final para asegurar el título.