Esta mañana se informó que un Tribunal Federal de apelaciones del Distrito de Columbia rechazó la alegación de Donald Trump de ser inmune a los delitos de conspiración que se le imputaron por intentar revertir el resultado de las elecciones del 2020.
Entre los argumentos del ex mandatario está que no debería ser perseguido porque todo ocurrió cuando estaba al frente de la Casa Blanca.
Esto significa que Trump deberá ir a juicio por este caso y conforma uno de los cuatro procesos penales en pie del magnate, que también están vigentes en Mueva York, Georgia y Florida.
Cabe señalar que el magnate es el primer presidente imputado en la historia de Estados Unidos, por lo que el sistema judicial ha tenido que tomar decisiones sin precedentes.
Aunque también es importante informar que todavía podría agotar una vía judicial y recurrir al Tribunal Supremo, movimiento que se espera que realice para que los nueve magistrados decidan si aceptan el caso. Por supuesto, Trump está utilizando todos los recursos disponibles a su alcance y con ello pueda ganar tiempo a favor.
Por su parte, el tribunal de apelaciones sostiene que Trump ya no es presidente y desde su ciudadanía está activando todas las defensas de cualquier otro procesado. Ya va un mes de que comenzaron los alegatos y ha sorprendido la rapidez de esta resolución y de alguna manera esto implica una nueva derrota de Trump ante la justicia.
Los delitos de los que se le acusa tienen que ver con el asalto al Capitolio, el 6 de enero del 2021, son cuatro y de gran gravedad: conspiración para defraudar al gobierno estadounidense, conspiración para obstruir un procedimiento oficial, obstrucción de un procedimiento oficial y conspiración para violar derechos civiles.