Este lunes el gobierno de Texas endureció su política antiinmigrante al firmar un paquete de leyes que es considerada de las más estrictas en la historia de Estados Unidos y otorga a la policía la facultad de detener y deportar migrantes sin el debido proceso.
Greg Abbot impulsó estas leyes que fueron aprobadas en las sesiones extraordinarias de la legislatura en respuesta a lo que considera una política de “fronteras abiertas” por parte del presidente de Estados Unidos.
Su nombre es SB4 ha convertido en delito menor, el que un extranjero intente ingresar al estado desde una nación extranjera de manera irregular. Pero la falta se convierte en un crimen grave que puede ser castigado hasta con 20 años de prisión si el infractor es reincidente.
Esta ley permite a la justicia estatal expulsar a personas sin un proceso judicial. Los policías podrán arrestar a cualquier individuo del que sospechen que ingresó al país de manera ilegal y sin ningún problema expulsarlo a México.
Abbott fue muy claro en que el objetivo de esta ley es parar la oleada de ingresos ilegales de extranjeros a Texas, pues desde que inició el gobierno de Joe Biden han ingresado más de 8 millones de migrantes al país.
Diversos activistas han argumentado que la ley propicia que el racismo se propague con mucho más fuerza, inclusive cuando Abbot ha dicho que sólo se enfocará en la frontera.
Recordemos que el gobernador instrumento su operación estrella solitaria contra la inmigración irregular a la que han sido asignados 9500 millones de dólares desde 2021, que ha incluido el cerco de alambre de púas y una barrera de boyas en el Río Bravo.
Dentro de este paquete de leyes, también sea asigna un presupuesto de 1,540 millones de dólares adicionales para la construcción del muro fronterizo y se realice el financiamiento de operaciones de seguridad en la región.
También está contemplado una pena mínima de 10 años para personas encontradas culpables de tráfico de inmigrantes.
Es importante destacar que con estas medidas que han implicado un fuerte gasto para el Estado, Abbot ha logrado consolidar su poder en el entidad al pasar por encima de las objeciones demócratas, pues ha logrado promover su agenda anti inmigrante a nivel nacional y con ello también ha desafiado al gobierno de Biden.
Sin embargo, se espera que este paquete de leyes sean impugnadas por el gobierno federal o por grupos pro inmigrantes que ya han anunciado la intención de asistir a la corte.
Por su parte, esta mañana, el presidente de la República ha dado a conocer que el gobierno de México impugnará esta ley.
“decirle a nuestros paisanos y a los migrantes que vamos vamos a estarlos defendiendo, que el gobernador de Texas actúa de esa forma porque quiere ser candidato a vicepresidente del partido republicano en Estados Unidos y quiere con esas medidas ganar popularidad” declaró.