Este fin de semana, activistas del grupo “última generación” decidieron intervenir en la Fontana de Trevi y lo hicieron tiñendo sus aguas de color negro en protesta por la contaminación y que los gobiernos dejen de invertir en combustibles fósiles, los cuales contaminan el mundo.
El líquido arrojado al agua es presumiblemente carbón líquido, el mismo que usaron en otras acciones similares como en la fuente de la Barcaccia de la Plaza de España o la de Los cuatro ríos en la Plaza Navona.
Fueron aproximadamente 12 jóvenes quienes entraron agua para decir “nuestro país está muriendo” a causa de la crisis climática y señalaron como una de sus consecuencias las inundaciones en Emilia-romaña