Dos de los felinos rescatados de la fundación Balck Jaguar-White Tiger que fueron trasladados al Zoológico de Chapultepec, tuvieron que ser intervenidos para extraer plásticos y huesos de su estómago, por lo que sufrían de gastritis, malestar y falta de apetito.
Así lo informó la Secretaría de Medio Ambiente de la CDMX y agregaron que cuatro de los ocho grandes felinos presentaron lesiones como amputaciones parciales en sus colas por lo que tres de ellos también fueron operados.
Esto debido a que tenía que implementarse un tratamiento para promover una cicatrización adecuada de la cola mutilada.
Al momento los ocho felinos están bajo un régimen balanceado de alimentación, que fue elaborado por los nutriólogos del zoológico, ya que se debe mejorar su estado a través de vitaminas y minerales.
“La condición de los felinos ha mejorado poco a poco y han logrado recuperar peso” se lee en el comunicado.
Los siete leones y la tigresa presentaban signos de desnutrición y mostraban una pobre condición corporal, aparte del bajo peso que pudimos apreciar en los videos con los que se hizo la denuncia, por lo que al momento están bajo estricta vigilancia y cuidado.