Al menos cinco personas murieron y decenas más resultaron heridas por el terremoto de 7.1 grados que sacudió la provincia Abra, al Norte de Filipinas, el movimiento sísmico provocó el desprendimiento de tierra en las zonas montañosas y daños en los edificios.
El secretario del Interior de la nación, Benjamin Abalos Jr., durante una conferencia de prensa confirmó las muertes y la 60 personas heridas. La hora del sismo fue a las 8:43 am, hora local, según la información brindada por el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
El secretario detalló que se registraron 58 deslizamientos de tierra en las zonas montañosas, por lo que 218 poblados se han visto afectados y tres puentes presentan daños graves.
“El suelo se meció como si estuviera en un columpio y de inmediato se fue la luz. Salimos a toda prisa de la oficina, y escuché algunos gritos y algunos de mis compañeros lloraban”, declaró un agente de seguridad en Lagangilang, localidad cercana del epicentro, Michael Brillantes.
Filipinas es un país asiático localizado en el Cinturón de Fuego del Pacífico, considerada la zona con mayor riesgo de sismos en el planeta, esto por el choque de las placas tectónicas.