Una vez más se vuelve a demostrar que los mexicanos tenemos un enorme corazón, y es que gracias un video posteado en redes sociales fuimos testigos de la emotiva acción de un hombre, quien inició una colecta improvisada para ayudar a dos abuelitas que iban recorriendo las calles a pocos minutos de comenzar el desfile de la Guelaguetza.
De acuerdo con las imágenes, las abuelitas estaban recorriendo el Andador Turístico Macedonio donde estaban congregados varios grupos de turistas para ver a las delegaciones de la Guelaguetza; la intención de las mujeres era poder verde alguna de sus artesanías con los presentes, sin embargo, ellas se llevaron una sorpresa aún mejor al ver como un hombre de la nada comenzó a pedir dinero para ayudarlas.
Mientras iban caminando, el sombrero de este ciudadano iba pasando por todos los rincones y de la nada muchos comenzaron a entonar “Cielito Lindo” al ver en gran gesto de la persona, el cual, sin duda se ganó el corazón de millones de internautas al ofrecer ayuda sin recibir nada a cambio. Como era de esperarse, todos extendieron ayuda a las abuelitas y poco a poco la recolecta tuvo un impacto fuerte en los turistas, quienes no dudaron en acercarse a las señoras para comprarles una artesanía o incluso a ofrecerse a cargarle sus pesadas bolsas.
“Se me salieron las lágrimas al ver a las abuelitas”, “Que orgullo ser mexicano”, “Ese es el México solidario, generoso y filial que siempre hemos sido y debemos ser. Un enorme aplauso para el hombre que decidió iniciar la colecta”, “Soy un mar de lágrimas, por favor apoyemos a los artesanos mexicano y dejemos de regatearles cuando los vemos”, “Siempre nos hemos distinguido por ser solidarios y apoyarnos entre nosotros. Realmente somos un país chingón”, son algunos de los comentarios.
Rumbo al final de los clips se ve como las abuelitas desconocían porque todos estaban tan atentos con ellas e inclusive se les veía seguir caminando como si nada estuviera pasando, pero recibían los abrazos de las personas de la mejor manera que hasta los billetes llegaron a salir volando desde los techos, pues todos desean ser solidarios.