La junta de gobierno del Banco de México, que es integrada por cinco miembros, decidió por primera vez desde 2008 que utiliza la tasa de referencia para combatir la inflación, aplicar un incremento de 75 puntos base.
Esto significa que la tasa de interés sube de 7% a 7.75% para intentar detener la inflación más alta en 21 años.
Fue en enero de 2008 cuando Banxico instauró la tasa como principal instrumento para combatir la inflación. Hasta este jueves, el mayor incremento aplicado había sido de 50 puntos base.
Esto ya se veía venir por los analistas y mercados financieros, inclusive algunos vaticinaban hasta un punto arriba. Esta es una estrategia que busca contener a la inflación y sus expectativas, mediante el encarecimiento de los créditos bancarios y la oferta de los mismos, lo que implicaría menor consumo e inversión.
Al mismo tiempo el banco dio a conocer que ajustó al alza su pronóstico de inflación para el cierre de este año, de 6.4% a 7.5%. Para este aumento se consideraron los retos para la conducción de política monetaria ante un escenario que se presenta igual a nivel mundial, así como el resurgimiento de casos de covid19 en China y la posibilidad de mayores afectaciones a la inflación.
Cabe mencionar que por el momento la inflación en México se mantiene de una cifra solamente porque el Gobierno Federal nos está ayudando con el subsidio del IEPS en las gasolinas, pero al final de cuentas es dinero que deja de circular en nuestra economía y que en algún momento nos rebotará de manera negativa.