Considerado uno de los mejores mariscales de campo en su generación, el próximo miembro del Salón de la Fama, quien llevó a los Packers a ganar el Super Bowl en febrero del 2011 ante los Pittsburgh Steelers.
Desde inicios de la campaña pasada demostró públicamente sus diferencias con la directiva del equipo y hasta llegó a afirmar que la 2021 podría ser la última con los Packers, pero ahora una de las novelas de la temporada baja de la NFL ha llegado a un feliz final, porque por fín se reporta un acuerdo para extender el contrato de Rodgers, por las próximas cuatro temporadas.
Con ello se convirtió en el mejor pagado de la historia en lo que a promedio anual se refiere. El contrato es por cuatro años y 200 millones de dólares, de los que 153 están totalmente garantizados. Las buenas noticias para Green Bay es que con el acuerdo a largo plazo redujeron el impacto de tope salarial del 2022, con lo que se abre la posibilidad de negociar con el receptor Devante Adams.
Aaron Rodgers llegó a los Packers a través del Draft NFL del 2005 para ser suplente de Brett Favre y en 2008 se convirtió en titular. Ha sido cuatro veces elegido el Jugador Más Valioso de la temporada en 2011, 2014, 2020 y 2021.