El presidente de Rusia ha dado la orden de despliegue de tropas para realizar funciones de mantenimiento de la paz (así lo ha denominado él) en los territorios separatistas de Lugansk y Donetsk, autoproclamadas repúblicas ubicadas al sureste de Ucrania.
Vladimir Putin decidió esto horas después de haber firmado los acuerdos de “amistad y ayuda mutua” que reconocen la independencia de las provincias separatistas. Ante esto, Alemania reaccionó y el canciller Olaf Scholz anunció el bloqueo de la certificación del gasoducto Nord Stream.
Por su parte, el presidente ucraniano Volodimir Zelenski anunció la convocatoria inminente de su Consejo de Seguridad y Defensa Nacional y estuvo en contacto con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden.
El gobierno de Biden ha anunciado sanciones contra las regiones separatistas. El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel y la presidenta de la Comisión, afirmaron que es una violación del derecho internacional, de la integridad territorial de Ucrania y de los acuerdos de Minsk. Por lo pronto Rusia ya evacuó a todos sus diplomáticos de Ucrania.
La Unión Europea ya anunció también que habrá sanciones, aunque al momento Putin no figura entre las personas objeto de sanción, se tiene en la mira que las sanciones sean comerciales y económicas: prohibición de entrada en territorio comunitario a decenas de altos cargos y políticos rusos, veto a ciertas entidades financieras y al Estado ruso para operar en el mercado financiero y el sector de servicios europeos.
También se tiene contemplado un embargo comercial a las dos provincias ucranianas declaradas en rebeldía. Lo que suceda puede poner en riesgo la estructura de seguridad de toda Europa, por eso es que las alertas son continuas.
Ante el conflicto, las Bolsas de México, España y otras partes del mundo también reportaron caídas, como las de los principales índices de la Bolsa de Moscú, que iniciaron este martes con fuertes retrocesos.