El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró esta mañana desde Palacio Nacional que los agentes de la Administración de Control de Drogas no tienen vínculos con el narcotráfico. que ellos no podrían hacer algo a espaldas del gobierno mexicano y que confía en la administración de Joe Biden y en el embajador Ken Salazar.
“Sí, tenemos muy buena relación con el gobierno de Estados Unidos y en especial con el embajador, Ken Salazar y la relación es a partir de la responsabilidad y del responsabilidad y del respeto mutuo, entonces no son las mismas condiciones de antes, ellos no podrían hacer algo a espaldas de nosotros, no podrían llevar a cabo operativos como el de Rápido y Furioso” reiteró.
Todo esto porque recientemente la DEA en México negó cualquier responsabilidad en lo que ellos llaman incidentes como la masacre de Allende en Coahuila, que llevó a la muerte a decenas de personas, entre el 18 y 20 de marzo del 2011, a manos del crimen organizado.
Se dijo que sus Unidades de Investigaciones Sensibles estuvieron penetradas por carteles y que su líder entre 2008 y 2016, Iván Reyes Arzate trabajaba como informante para los cárteles de Sinaloa y los Beltrán Leyva.