Durante un desfile de Navidad por Main Street en Waukesha, Wisconsin, una camioneta embistió a los asistentes, participantes de danza y bandas de música escolares que desfilaban. Alrededor de 40 personas resultaron heridas y cinco más murieron.
Daniel Thompson, jefe de la policía de Waukesha, reportó la detención de un sospechoso, Darrell E. Brooks. Aseguró que el hombre de 39 años no tuvo cómplices en el ataque y estaba en una persecución policial momento antes del incidente.
“Cuando el sospechoso embistió y manejó hacia la multitud, uno de los agentes le apuntó con su arma y disparó para detener la amenaza, pero debido a la gran cantidad de gente, tuvo que detenerse y no disparar más”, añadió.
Al respecto, el presidente Joe Biden declaró su sentir ante la situación. La Casa Blanca “monitorea de cerca la situación en Waukesha y nuestros corazones están con todos los que han sido afectados por este terrible incidente”, afirmó. “Hemos contactado a las autoridades estatales y locales para ofrecer el apoyo y la asistencia necesarios”, agregó el jefe de estado.
Medios locales aseguran que la mayoría de los heridos son menores de edad, van de los tres años a los 16 años. Algunos tienen heridas leves, huesos rotos, lesiones faciales y heridas en la cabeza.
Tony Evers, gobernador de Wisconsin, informó que su pareja y él están orando por los afectados. “Kathy y yo estamos orando por Waukesha esta noche y por todos los niños, familias y miembros de la comunidad afectados por este acto sin sentido. Estoy agradecido por los socorristas y las personas que actuaron rápidamente para ayudar, y estamos en contacto con socios locales mientras esperamos más información”, declaró.