Hace once años, el 25 de enero del 2010 un percance en un bar al sur de la Ciudad de México cambió de manera inesperada la vida de Salvador Cabañas. Un balazo en la cabeza le arrebató todo y tuvo que alejarse de las canchas y reflectores, por lo que surgieron varias versiones sobre las condiciones en las que el ex futbolista vive ahora.
Incluso se publicaron unas fotos en una panadería de su natal Paraguay en las que parecía que Cabañas no estaba pasándola nada bien.
Pero fue en una entrevista con el Escorpión Dorado que el ex delantero americanista señaló que todos los rumores rugidos en torno a las fotos publicadas fueron falsos.
“No me gustó que dijeran que estaba trabajando en una panadería, que era muy pobre. Yo le puse una panadería a mis padres para que tuvieran sus negocios y estuvieran tranquilos. Me dijeron que posara con los panes y ya” explicó, Salvador.
Aprovechó para informar que tiene distintas formas de generar dinero, entre ellas un complejo deportivo y el alquiler de unos terrenos. La panadería ya no es una de ellas.
El guaraní contó algunas de las malas costumbres que tenía junto a otros futbolistas para no jugar, por lo que no le gustaría ser director técnico.
“No me gustaría lidiar con algunas cosas que hacíamos, nos hacíamos los lesionados para no entrenar o jugar algún partido. Eso no me gustaría que pase conmigo… Lo hacíamos por cansancio, eran muchos partidos y nos sentíamos agotados. Al kinesiólogo le decíamos que nos molestan ciertas cosas” recordó.