Después de un acuerdo alcanzado entre el Atlético de Madrid y el Barcelona para la cesión del atacante, por una temporada con opción a otra prorrogable, Antoine Griezmann es jugador rojiblanco.
“Regresa así a nuestro club un jugador de talla mundial y que se encuentra entre los futbolistas más desequilibrantes del panorama futbolístico” se lee en el comunicado del club deportivo.
En una etapa anterior que comenzó en 2014, Antoine completó cinco temporadas en las que el delantero se confirmó como uno de los mejores jugadores del mundo. Con el jersey rojiblanco disputó un total de 257 partidos, dando 50 asistencias y marcando 133 goles, que lo sitúan como el quinto máximo goleador en la historia de la institución, solo detrás de leyendas como Luis, Escudero, Campos y Gárate.
El francés fue un pilar en el ataque del equipo, siendo pieza clave en las conquistas de la Supercopa de España de 2014, la Supercopa de Europa de 2018 y la Europa League de ese mismo año, en la que fue nombrado como mejor futbolista del torneo y de la final, dónde abrió el marcador con un doblete en el 0- 3 frente a Olympique de Marsella.
En 2018 lideró a la selección de Francia que ganó el Mundial de Rusia, donde marcó cuatro goles y dio tres asistencias.