Ya habíamos reportado que surgió un socavón con 20 metros de profundidad y 60 metros de diámetro, en el campo del municipio Juan C. Bonilla, en Puebla. Pues el hoyo sigue en plena expansión, pero no solo en la tierra, se expande para ser una fuente de ingresos.
El lugar se ha convertido en una atracción turística, incluso cuando está acordonado, vigilado por la policía estatal, militares, patrullas de protección civil, para optimizar las medidas de seguridad.
Aunque ya los curiosos encontraron la forma de acercarse, para aquietar la curiosidad. Por lo que los fines de semana la gente de la zona ha comenzado a vender paletas, comida, raspados y en caso de necesitar ir al baño, por cinco pesitos, puedes pasar a una de las casas que están ahí cerca.
Por otro lado, la familia de la casa que se vio afectada por este hecho ya desalojó la propiedad.
El hecho es que esta noticia ha despertado el interés de la comunidad, de los medios nacionales e internacionales y se han encargado de difundir el suceso que es el resultado del reblandecimiento de la tierra de cultivo y la sobreexplotación de los mantos acuíferos que se encuentran cerca del Popocatépetl e Iztaccíhuatl.
Una vez más, la naturaleza responde a las acciones que tomamos. Sabemos que la curiosidad ante un hecho como este es infinita, pero no dejemos de recordar que es importante mantenerse a salvo y así como este socavón surgió repentinamente, podría seguir creciendo. Si deciden ir, tomen sus precauciones.