Después de 23 años, cinco meses y veintitrés días, los aficionados de Cruz Azul vuelven a festejar un título, a través de la expresión de un cúmulo de emociones y acciones en las que parecía que ya la pandemia por COVID19 ha desaparecido o que los mexicanos ya tuvimos acceso a la vacunación, a los niveles de Estados Unidos.
La multitud no pudo esperar, se reunió en el Ángel de la Independencia, que aunque hasta el momento sigue en trabajos de restauración, no deja de ser escenario simbólico para compartir alegrías como esta:
Los cementeros tuvieron que esperar más de 2 décadas para que el triunfo llegará, por esta razón decidieron salir a las calles y lograron llenar el Ángel de la Independencia.
Familias enteras llegaron hasta el lugar, donde se puso a disposición de la afición y para guardar el orden a 500 elementos de la secretaría de Seguridad Ciudadana y se calcula que asistieron cerca de 10 mil aficionados que no podía de la emoción por que la “maldición” por fin se fue.
Pero no sólo se trató del ángel, también la famosa torre BBVA se puso de los colores del Cruz Azul y así se sumó a la gran celebración.